Al tomar una decisión entramos de lleno en el juego de la vida y, aunque luego demuestre ser equivocada, nos dará el aprendizaje necesario para futuras partidas que nos proporcione la vida.
La mayoría afrontamos sin dificultad las pequeñas elecciones cotidianas, pero cuando se presentan las que son cruciales es fácil que nos asalten las dudas o que lleguemos incluso a la parálisis por análisis.
Para salir del bloqueo proponemos algunas claves prácticas.
→ Desafía la idea. Cuando se trata de una decisión con importantes consecuencias, una manera de ponerla a prueba es tratar de destruirla a través de la pregunta: ¿Cuáles serían las razones para no tomar esa decisión? Si no encuentras al menos una buena razón, significa que la idea puede ser sólida.
→ Genera múltiples opciones. A veces la elección no está entre A y B, sino que el abanico de opciones es mucho más amplio. Tal vez se trate de una vía intermedia entre A o B, o de otra alternativa que no se nos había ocurrido hasta ahora.
→ Atrévete a equivocarte. En la vida hay momentos en los que no podemos elegir no decidir, ya que determinados contextos nos obligan a hacerlo, y no queda más remedio que asumir las consecuencias de nuestros actos. Es mejor errar y, a partir de ese nuevo conocimiento, corregir el rumbo que permanecer de brazos cruzados.
En el juego y en la vida, quien no tiene ningún plan se ve arrastrado por los planes de los demás.
Un mal plan es mejor que no tener ningún plan.
Al tomar una decisión entramos de lleno en el juego de la vida y, aunque luego demuestre ser equivocada, nos dará el aprendizaje necesario para futuras partidas que nos proporcione la vida.
En Cesaplorca estamos a tu disposición. Déjanos ayudarte desde nuestra unidad de psicología a salir de la parálisis ante decisiones importantes. + info 968 100 006 o en nuestro formulario de contacto.