El estrés es una reacción fisiológica necesaria para que el ser humano responda rápidamente ante una situación de alerta y/o amenaza. Sin embargo, en la actualidad, este estrés no se limita sólo a un momento de necesidad sino que se mantiene activo de forma continuada haciéndose crónico y provocando que los sistemas del cuerpo humano (sistema inmune, sistema visceral, sistema endocrino, sistema muscular…) no dispongan de la energía suficiente para mantener el equilibrio adecuado dando lugar a determinados síntomas.
Como consecuencia, puede contribuir a ocasionar ansiedad y depresión (entre otras) y, por tanto, aumenta el riesgo de contraer enfermedades cardíacas.
- Dolor corporal.
- Debilidad.
- Cefaleas frecuentes.
- Aumento de consumo de sustancias o alcohol.
- Estreñimiento o diarrea.
- Sensación de inseguridad.
- Cansancio excesivo, decaimiento.
- Mandíbula rígida, músculos tensos.
- Problemas con el sueño.
- Enfermedades cutáneas.
- Problemas digestivos.
- Variación de peso inusual.
- Etc.
Es por ello, que en presencia de estrés crónico y dolor muscular, el fisioterapeuta es el profesional más indicado para la recuperación de la funcionalidad y el equilibrio corporal a través del movimiento. Ante cualquier duda, no dejes de consultarnos.